
Hoy celebro mi 65 cumpleaños, no solo como un hito en el tiempo, sino como un momento de profunda reflexión y gratitud.
Desde mis primeros días en Dakar, Senegal, donde aprendí a soñar en francés, hasta el audaz salto de emigrar a los Estados Unidos, donde construí un futuro en inglés, pasando por mi viaje por América Latina, donde el español se convirtió en un puente hacia los corazones y las oportunidades, hasta los años que viví en Lisboa, Portugal, reconectando con mis raíces caboverdianas y profundizando mi fluidez en el portugués, el idioma ha sido el hilo conductor que ha tejido mi vida y mi propósito global.
Estos cuatro idiomas no son solo herramientas, son portales de conexión que me permiten inspirar, servir y liderar en más de 88 países y 500 ciudades.
Un viaje de liderazgo, reinvención y riesgo
Durante los últimos 45 años, he desempeñado muchas funciones:
• Distribuidor de campo con el mejor rendimiento en la profesión de venta directa
• Ejecutivo de expansión internacional, abriendo mercados en casi todos los continentes
• Director ejecutivo de una empresa global de bienestar, Mannatech, liderando a miles de emprendedores
• Mentor y motivador, ayudando a otros a encontrar la libertad, el propósito y la fe

He ascendido en la escala corporativa, he alcanzado la libertad personal y luego he decidido volver a la vida corporativa, no por necesidad, sino por vocación. Ahora me encuentro en una poderosa encrucijada de experiencia, fe y claridad.
De La ecuación de la motivación: El camino menos transitado
Mi libro, La ecuación de la motivación, es más que una biografía, es un plan de acción.
Revela las encrucijadas decisivas, los riesgos que asumí y la fe que me llevó a decir sí cuando el camino no estaba claro. Espero que inspire a la próxima generación a dejar de esperar permiso y empezar a confiar en su propia voz, incluso si esa voz habla en más de un idioma o recorre más de un mundo.
Mi mayor riqueza: mi familia, mis mentores y mi legado
En este día, debo honrar a quienes hicieron posible esta vida.
🕊️ A mi madre, María Alicia Barros Bala
Hoy es el segundo cumpleaños que celebro sin su bendición.
Durante 63 años, su voz adornó cada celebración. Su ausencia hoy es un dolor silencioso , pero su amor todavía me rodea.
Mãe, tu espíritu vive en todo lo que soy.
👨👩👧👦 A mi padre, Lucidio, y a mis hermanos Olivier, Robert, Belmiro y Adelina
Habéis sido mi primer equipo, mi base. El legado de nuestros padres sigue vivo en nuestra unión.
❤️ A mis hijos: Sabrina, Alain y Joshua
Sois mi mayor orgullo. Veros convertiros en líderes por derecho propio es la alegría de mi vida.
💍 A mi esposa, Johanna
Tu amor y tu fe han reavivado mi pasión y mi propósito. Has traído el fuego y la alegría colombianos a cada rincón de mi mundo.
💞 A Stephanie, Catherine y Andrés
Gracias por dejarme amaros como si fuerais mis hijos. Juntos, con nuestros siete nietos, estamos construyendo un legado vivo y palpitante.
🌟 A mis mentores
Sabéis quiénes sois, estén cerca o lejos, visibles o invisibles. Vuestras palabras iluminaron mi camino. Vuestra fe impulsó mi ascenso.
El éxito es un deporte de equipo, y yo tuve el mejor equipo.
Entonces... ¿qué sigue?
Esta mañana me miré al espejo y dije:
No he terminado. Solo estoy empezando.
Tengo energía en mi espíritu, propósito en mis pasos y fuego en mi corazón para seguir construyendo. Los próximos 20-30 años de mi vida los dedicaré a:
• Ser mentor de la próxima generación de emprendedores con un propósito.
• Enseñar en diferentes culturas y continentes, en francés, inglés, español y portugués.
• Inspirar a otros a vivir según sus propios términos, con fe, claridad y valentía.
• Crear contenidos y experiencias que ayuden a otros a diseñar vidas de libertad, impacto y legado.
65 lecciones en una frase
Después de 65 años, esto es lo que sé:
Asume el riesgo. Acepta el desafío. Honra tus raíces. Construye tu futuro. Y nunca dejes que otros definan tu valor.
Lo mejor está por venir
A todos los que han caminado conmigo, familia, amigos, mentores, socios y desconocidos que se convirtieron en compañeros y mejores amigos, gracias. Están grabados en mi legado.
Y a aquellos que aún no he conocido, pero que conoceré...
Construyamos algo que perdure.
Porque lo mejor no está detrás de mí.
Está delante de mí.
Y si estás leyendo esto, creo que también está delante de ti.
Vamos.
— Alfredo Bala
The Motivation Guy